jueves, 29 de octubre de 2015

Mesa dulce de Halloween (Tercera parte)

¡Buenos días! Hoy traemos la última entrega de nuestra mesa dulce. Haremos un brownie con avellanas, montaremos la tarta y decoraremos todo lo demás. Y además montaremos la mesa. ¡Vamos a por ello!



Brownie con avellanas


Vamos a empezar horneando nuestro brownie. Para hacerlo vamos a necesitar:

130 gr de harina simple
Una pizca de levadura
4 huevos
225 gr de azúcar
185 gr de mantequilla a temperatura ambiente
100 gr de chocolate puro (yo he aprovechado lo que me sobró de decorar los fantasmas)
15 gr de cacao
60 gr de avellanas tostadas ligeramente trituradas


Precalentamos el horno a 180ºC. Para empezar batiremos la mantequilla con el azúcar. A continuación agregamos los huevos de uno en uno y los vamos integrando. 


Derretimos el chocolate y lo agregamos a la mezcla.


Añadimos la harina y mezclamos. Agregamos las avellanas.


Preparamos nuestro molde poniendo papel sulfurizado, dejando que salga por los lados y engrasando los laterales sin papel, de esta forma nos será más sencillo sacarlo, tan solo tendremos que tirar del papel.


Horneamos a 160ºC de 35 a 45 minutos.


Cuando esté lo dejamos enfriar por completo en el molde sobre una rejilla. Lo decoraremos utilizando un poco de merengue que reservamos de la tarta y colocando los fantasmas encima.


Montaje de la tarta


Para montar nuestra tarta vamos a hacer trufa para rellenarla y merengue para cubrirla. Y se estarán preguntando ¿pero la mezcla de calabaza-trufa-merengue queda bien? Pues la respuesta es sí, combinan maravillosamente.

Para empezar vamos a hacer la trufa, necesitamos:
1 litro de nata bien fría
400 gr de chocolate negro

Primero derretiremos el chocolate. Y mientras se enfría un poco semimontaremos la nata, tiene que quedar densa pero no completamente montada.


Cuando tengamos ambos pondremos en otro bol una gran cucharada de nata y le agregaremos la mitad del chocolate, lo mezclamos bien, agregamos más nata y añadimos la otra mitad del chocolate. 
Lo mezclamos todo bien. Ahora vamos incorporando el resto de la nata.


Otra forma de hacer la trufa más sencilla es haciendo una ganaché, pero tendremos que dejarla preparada el día antes. Esta se hace hirviendo la nata y vertiéndola sobre el chocolate, dejamos reposar unos minutos y removemos con unas varillas hasta que se disuelva por completo el chocolate. La guardamos en la nevera durante toda la noche, al día siguiente la montamos con unas varillas y ya podemos utilizarla.

Cortamos los bizcochos con una lira, o con un cuchillo y ponemos la trufa entre cada capa. Para que nuestro trabajo sea más fácil y evitar roturas de los bizcochos podemos recortar un cartón del tamaño del bizcocho y utilizarlo como si fuese un plato, esto también nos hará más fácil el traspasar la tarta de un lado a otro.
Yo he hecho dos tartas de dos capas, pero una tarta de tres capas queda perfecta en una mesa dulce. Cuando la hayamos rellenado limpiamos los bordes y la metemos en la nevera.


Mientras se enfría podemos ir decorando nuestros palitos y hacer el glaseado del bundt.

Cuando la trufa se haya endurecido bastante, haremos el merengue. Para hacerlo necesitaremos unas 4-5 claras y el doble de su peso en azúcar. 
Es este caso fueron:
200 gr de claras
un chorrito de limón
400 gr de azúcar


El azúcar lo he dividido en un bol de 150 y otro de 250.
Los 250 gr de azúcar los pondremos al fuego medio-bajo con un poco de agua para que se disuelva, lo vigilaremos hasta que se disuelva pero no lo moveremos.


Cuando se disuelva pondremos a batir las claras con el limón y cuando empiecen a estar espumosas agregaremos los 150 gr de azúcar de varias veces mientras batimos. Cuando hierva un minuto (aproximadamente) el almíbar lo apartamos y lo vertemos en hilo sobre las claras montadas. Estaremos batiendo hasta que el bol se enfríe, es un rato.


Algunos consejos para merengue: evitar que las claras tengan restos de yema. Montarlo siempre en un bol de metal que no tenga ningún resto de grasa, para asegurarnos de que se han eliminado podemos limpiar el bol con una servilleta y un chorrito de limón o vinagre blanco.
Cuando lo tengamos montado, cubrimos nuestra tarta y la decoramos como más nos guste. Yo he hecho esto con la misma espátula con la que lo extendí, le di ligeros golpecitos sobre el merengue.
Cuando esté cogemos un soplete y quemamos el merengue (con cuidado, no le vayamos a prender fuego o a quemarnos!).


Y listo. Ya tenemos nuestra tarta. Ahora la guardamos en la nevera hasta que vayamos a montar la mesa, en ese momento podemos dejarla en el plato en el que la montamos o pasarla a otro.


Decoración palitos de galleta


Para decorar estos palitos utilizaremos chocolate blanco y chocolate negro (o con leche) para bañarlos hasta la mitad aproximadamente, yo he utilizado una cucharilla para asegurarme de que el chocolate llegaba hasta donde quería.


Podremos decorarlos con cualquier tipo de sprinkle o con m&m's o conguitos triturados, o lo que se nos ocurra. Quedan muy vistosos y ricos. Yo probé a decorar con unas regalices rojas para que parecieran gusanos, pero la cosa no salió bien, así que no las recomiendo. A medida que los vayamos bañando y decorando los colocamos sobre una bandeja con papel sulfurizado, de esta forma nos aseguramos de que se secan y no se quedan pegados a la bandeja.


Glaseado del bundt de calabaza


Para glasear el bundt necesitamos:
200 gr de azúcar glas tamizada
el zumo de una o dos mandarinas o naranjas


Para que nos quede bien vamos agregando poco a poco el zumo al azúcar glas y removiendo con un tenedor. Si nos queda my líquido podemos agregar más azúcar glas.


La consistencia que buscamos es un poco más líquida que una glasa densa pero lo justo como para que al hacer dibujos con el tenedor quede la marca unos segundos.



Ahora colocamos el bundt sobre una rejilla y lo vertemos por encima con la ayuda de una cuchara.
Lo dejamos escurrir y ya lo podemos poner en el plato que vayamos a usar para nuestra mesa.



Crema de queso para los cupcakes


Y por último vamos a preparar nuestra crema de queso. Para ello vamos a necesitar:

270 gr de queso crema de tipo Philadelphia, entera, nunca light
125 gr de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
125 gr de azúcar glas
1 cucharadita de aroma de vainilla


Además vamos a necesitar una batidora de varillas. Primero batiremos el queso solo hasta que no nos queden grumos. A continuación agregamos la mantequilla y lo integramos todo bien. Y ahora la vainilla.


Por último vamos a agregar el azúcar glas tamizado  y lo mezclamos todo bien.


Y ya tenemos nuestra crema preparada. Ahora vamos a trabajar con nuestros cupcakes. ¿Se acuerdan de la mermelada de fresa que hicimos el primer día? Pues vamos a utilizarla para rellenar y decorar nuestros cupcakes. Primero abriremos un agujero en el centro del cupcake, esto lo podemos hacer con un cuchillo pero queda mejor si utilizamos un descorazonador de manzanas, aunque ya hay utensilios específicos para esto. Hacemos un agujero, no demasiado profundo, que rellenamos con la mermelada y volvemos a tapar con el bizcocho que habíamos retirado, lo siento no vale comérselo...


Cuando tengamos todos nuestros cupcakes rellenos podemos empezar a decorar. En este caso he decidido decorar los cupcakes de dos formas, una con espátula haciendo un hueco en el centro para poder poner una bolita que parece un ojo y la otra con una rosa con bordes rojos.
Para hacer la rosa he utilizado la boquilla 1M de Wilton, pero podemos utilizar cualquier boquilla con forma de estrella. Además he puesto colorante rojo en la manga pastelera, para que coloree los bordes de la rosa.


Y esto es el producto final. Los ojos son terroríficos ¿verdad?


Y listo, ya tenemos todos los dulces que van a ir en nuestra mesa dulce. Ahora toca decorarla y montarla y luego comérselo todo. Así es como nos ha quedado a nosotras.


Algunas fotos más de cerca.







Nuestras calabazas decoradas con las luces apagadas.


Y ahora un vídeo de nuestra mesa para que la vean bien.


Y por último la tarta sola rodeada de calabazas.


Y la tarta abierta, ¡¡estaba deliciosa!!


Esperamos que les haya gustado este experimento de mesa dulce. ¡Pasen un feliz y terrorífico Halloween! Y si no lo celebran, pues es un buen día para comerse algo con calabaza...
Nosotras los vemos la semana que viene con otra receta deliciosa. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario